La necesidad de ejercer la tarea de aconsejar mediante la consejería cristiana de manera profesional es cada día mas apremiante en la sociedad contemporánea. En la APCC estamos comprometidos en ayudar al desarrollo de los consejeros cristianos, a todo aquel que desea funcionar en la consejería orientada en la fe cristiana, ya sea a los profesionales con licencia, a los pastores y a los miembros laicos de la iglesia con poca o ninguna capacitación formal.


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La consejería es el proceso de guiar al cliente mediante el uso de alternativas (recursos necesarios o herramientas particulares) para que alcance una mejor salud mental. Un consejero clínico o consejero profesional trata a los clientes en función del ámbito en el que el cliente está incómodo o molesto. El consejero habría investigado las posibles soluciones que tienen un impacto en los clientes. Este proceso toma algunas sesiones según la situación del cliente.


La consejería cristiana es una dinámica compartida entre el consejero y el aconsejado (consultante). Es acompañar a una persona en el proceso de encontrar alternativas viables, responsables, positivas y creativas a sus problemas. Mediante el proceso de consejería se ayuda a la persona a modificar pensamientos, sentimientos, actitudes y comportamientos perjudiciales que contribuyen con su situación de consulta. Es por eso que aconsejar no es dar consejos, no es una acción bien intencionada pero fútil. La consejería cristiana utiliza la revelación y comprensión de la palabra de Dios, junto a las técnicas de consejería basadas en evidencia, promueve la salud mental y espiritual para ayudar a las personas a través de todos los desafíos de la vida.
La Consejería Psicológica* es aquella que utiliza una amplia gama de prácticas culturalmente informadas y culturalmente sensitivas para ayudar a las personas a mejorar su bienestar, prevenir y aliviar distrés, resolver crisis, y aumentar su habilidad de funcionar mejor en sus vidas.  Se enfoca específicamente pero no exclusivamente en el desarrollo normativo a lo largo del ciclo de vida, con un énfasis particular en la prevención y la educación, dirigiéndose tanto a los individuos, así como a los sistemas y contextos en los cuales estos funcionan.


*American Psychological Association (APA).
Creemos que un consejero pastoral es quién brinda apoyo espiritual, emocional y cognitivo a través de consejos (no superficiales); ayudando a las personas a encontrar significado para sus vidas y relaciones basados en las Sagradas Escrituras. Un consejero cristiano es un profesional adiestrado y preparado en campo de la psicología y la teología, con un conocimiento adecuado sobre el comportamiento humano. El consejero cristiano o consejero pastoral es un especialista sensible, debidamente preparado y certificado para ofrecer herramientas adecuadas como alternativas para afrontar crisis, conflictos y situaciones indeseadas de sus aconsejados.
El consejero clínico cristiano ejerce una función de ayuda al tener que trabajar con un individuo, una pareja, un matrimonio, una familia, un grupo, una organización o una comunidad. El consejero clínico cristiano a diferencia de los consejeros no cristianos o seculares, puede incorporar la oración, las Escrituras y otras prácticas de fe con intervenciones clínicas de salud mental para ayudar a los clientes a encontrar una armonía saludable en su vida, matrimonio, familia, o ministerio.
Nuestro logo representa la dinámica de interacción que ocurre en el proceso de consejería cristiana. Al fondo y cómo fundamento base se puede apreciar el libro de las Sagradas Escrituras, donde el color rojo resalta el sacrificio de Cristo mediante Su Sangre. Sacrificio que fue hecho para otorgar el perdón del pecado y redención mediante la fe, a todo aquel que cree (Efesios 1.7).
El ser humano posee un alma y en el dibujo del rostro de perfil aparece la letra griega Psi del alfabeto griego, la cual es la representación de la palabra “Psyche” que significa “aliento”, “ánimo”, “soplo de viento”, “alma” y “mente”. Las flechas representan la interacción de las personas con las Sagradas Escrituras, la cual mediante la consejería cristiana le ayuda en su necesidad de restaurar y/o fortalecer su vida espiritual con Su Creador.
Considerando que el hombre fue creado como un ser tripartito (espíritu, alma y cuerpo; 1 Tes 5:23) tiene la tendencia a desatender su necesidad espiritual, la cual, la mayoría de las veces se elude en procesos de consulta y sicoterapia mediante la consejería secular. Pudiendo ser atendido efectivamente de forma holística mediante el proceso de Consejería Pastoral y Consejería Cristiana.